jueves, 19 de abril de 2018

ENCUENTROS CON ALUMNOS DE 4º DE PRIMARIA DEL COLEGIO DIVINO MAESTRO DE MADRID

"Tenemos que hacer un trabajo sobre artistas. Yo estoy en el grupo de escritores y te he elegido a ti, Ángela. Voy a hablar de tu vida, de tus libros...".
Alba Rico Martín, que muy pronto cumplirá diez años, lo tiene claro.
Prepara su trabajo con inmensa ilusión y antes de llegar el día de la exposición me pregunta si podría ir a su colegio, el Divino Maestro. Me encanta la idea, porque voy a la que fue mi escuela hasta 8º de EGB y de la que guardo recuerdos exquisitos.
Alba ya ha hablado con su profesora Yolanda, con quien me pone en contacto.
La acogida es cálida como los aromas que me devuelven a mi niñez y que me hacen sentir en casa. 
Los alumnos se entregan con entusiasmo en sus exposiciones y sus preguntas.
¿Qué obstáculos has encontrado en tu camino?
¿Por qué escribes?¿Desde cuándo?
¿Cuánto tardas en escribir un libro? 
¿Cómo se escribe un libro?
¿Qué cosas o situaciones te hacen muy feliz?
Brotan las respuestas a sus miradas, miradas con las que conecto y sí, este es uno de esos momentos de felicidad inmensa porque el amor va y viene, se palpa (dedicatorias incluidas), y nos llena.
Y al salir vuelvo a pararme con Alba ante sus trabajos.
Me veo allí junto a Miguel Hernández, Lope de Vega, Gustavo A. Bécquer y me emociono, dos  fechas acotan sus vidas con un legado trascendente. Yo, he nacido (¡y renacido!)... Imagino puntos suspensivos que aletean en mis entrañas: son las hojas de los libros ya impresos y las que aún lucen en blanco, libres, para escribir lo mejor.
Gracias Alba, gracias Yolanda, gracias  a cada uno de los que habéis hecho posible tan maravilloso encuentro.